Tener éxito en un restaurante depende de múltiples factores. La calidad de nuestro menú es fundamental. La comida de quinta gama puede mostrarse en este sentido como un aliado inigualable. Pero además de la buena calidad de nuestra oferta gastronómica, debemos entender que el éxito es un conjunto. Ningún restaurante puede triunfar sólo con buena comida. Por ello, en CCGS queremos ofreceros algunos consejos para hacer de vuestro modelo de negocio gastronómico un espacio de éxito.
Cuidar siempre los detalles
En hostelería en general y en un restaurante en particular los detalles son la base fundamental. Siempre hay que tenerlos en cuenta: para todo. Una de las notas distintivas de los chefs más exitosos y los restaurantes más renombrados consiste precisamente en ello. La comida de quinta gama es una oportunidad de poder ofrecer un gran nivel con una posibilidad que nos ofrezca garantías. Otros aspectos a tener en cuenta en cuanto a los detalles serían la cubertería, por ejemplo.
Tu cubertería no tiene por qué ser clásica. Puedes hacer que se integre con todo lo que rodea al comensal. De hecho, es una manera de comunicarle al cliente que es el local mismo quien quiere ofrecerle una experiencia gastronómica. En este sentido, todos los elementos que estén en contacto directo con el comensal pueden ayudarnos a comunicarle nuestra hospitalidad y nuestra idea de negocio: la mesa, la cubertería, los manteles.
Hay que abandonar el concepto de restaurantes-comederos. Las innovaciones de las que hablamos no son sólo una cuestión de estética: son también una forma de conseguir fidelización. Cuando un cliente repita asiduamente es porque le gusta toda la atmófera. Si sólo le gusta un plato y no el sitio es cuando pide la comida para llevar. La comida de quinta gama puede ayudarnos mucho en este sentido.
La decoración como gran aliada
No hace falta un gran presupuesto ni un diseñador de interiores venido del otro lado del mundo. Simplemente, hay que marcar un concepto inicial. Antes de empezar cualquier reforma o proyecto coge papel y lápiz y traza algunas ideas básicas para tu negocio. Ellas tendrán que ver con la llamada identidad corporativa. Es decir, la identidad con la que tu negocio quiere identificarse.
Aquí se trata de perfilar hilos conductores que servirán para dar un sentido concreto y un carácter genuino a nuestro restaurante. No busques lo abigarrado, cuanto más sencillo mejor. Es buen momento para plantearse un modelo de negocio temático. Funcionan muy bien y sus opciones son muy variadas. En efecto, con temático podemos incluir un sólo ingrediente.
Lo clásico en este sentido sigue funcionando: proponer un espacio para la gastronomía mexicana, española, nórdica o asiática sigue funcionando. Sin embargo, también podemos hacer una propuesta donde un simple ingrediente como el pan o el queso hagan de piedra de toque de toda la carta. Esto nos ofrece grandes posibilidades a la hora de dotar de identidad y decoración a nuestro restaurante.
Otro de los puntos fuertes de la comida de quinta gama es que puede ayudarnos a ofrecer un menú muy flexible. Entre los conceptos que tu negocio debe contemplar está el de a qué tipo de comensales quiere servir. Por ejemplo, debemos discernir bien si se tratará de un menú sólo para adultos o también incluirá a los niños, es decir, un menú más familiar. Sigue otras recomendaciones propuestas para los restaurantes desde CCGS. Además, puedes echarle un vistazo a la comida de quinta gama de máximo nivel que ofrecemos a nuestros colaboradores. La alcachofa confitada o el timbal de gamba son algunas de ellas.